La situación de incertidumbre provocada por la crisis sanitaria -devenida en crisis económica- del COVID-19, no tiene precedentes en el mundo actual. O los tiene muy lejanos, con la pandemia de la llamada gripe española, de 1918, en plena I Guerra Mundial.
Todos los procesos de cambio que ya estaban en marcha y que afectan al sector como la digitalización o la omnicanalidad, se han acelerado y aumentan el grado de incertidumbre en el mercado.
Y, lo peor, es que no sabemos qué va a pasar mañana, cómo va a evolucionar la pandemia, cómo la van a afrontar los responsables políticos, cuántas bajas va a provocar en el ámbito empresarial…
Vivir en la incertidumbre nos produce ansiedad, nos genera dudas y hace que tendamos a postergar decisiones hasta “a ver qué pasa”. La mayoría de los seres humanos no se sienten cómodos ante la falta de certezas y el dinero se vuelve reservado y temeroso.
Necesidades básicas que cubrir
Sin embargo, cada día amanece y la sociedad tiene necesidades mínimas que satisfacer. Entre otras:
- Mantener las infraestructuras básicas (carreteras, canalizaciones, hospitales, escuelas, etc)
- Garantizar el suministro de agua y de energía.
- Construir nuevas viviendas y rehabilitar las antiguas.
- Regar y conservar parques y jardines.
- Limpiar calles y recoger residuos.
- Garantizar la movilidad de bienes y personas.
- Arreglar los desperfectos de hogares, industrias, hoteles o comercios.
Sea cual sea la situación, por muy incierta que sea y mientras no se hunda el mundo definitivamente, el sector de ferretería, suministros y bricolaje tendrá un papel protagonista para garantizar la satisfacción de muchas de esas necesidades.
Resiliencia vs incertidumbre
Puede que el mercado sea más pequeño y puede que la presión sobre los precios sea mayor, hasta es posible que la venta online acabe sustituyendo a la presencial; pero seguirá habiendo negocio para los que sepan y puedan adaptarse.
Ahí entra en juego una palabra en desuso hasta hace poco: resiliencia, o la capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o en un estado o situación adversos.
Nuestro sector ha dado repetidas muestras de resiliencia en el pasado cercano y espero que siga manteniendo esa capacidad de adaptación a situaciones donde las incertidumbres dominan sobre las certezas.
Pero no conviene engañarse, la cosa está cruda y el mercado va a ser más selectivo que nunca. Adaptarse o morir, no hay otra alternativa.
Después de unas semanas de vacaciones atípicas, me reincorporo a esta cita semanal con una única certidumbre: que vivimos en la incertidumbre.
Unos pocos ejemplos de acontecimientos sectoriales que la refuerzan :
- Feria de Valencia pospone Eurobrico a 2021
- AECOC suspende el Congreso de Ferretería y Bricolaje
- Coferdroza se queda como único socio de Profer
- Juan Luque sale de Óptimus y se incorpora a Cadena 88
- Bricodêpot retoma su proyecto en España
- Bricor cierra centros y reduce superficie
- CMB vuelve a Bricogrup
- Cofedas y Coanfe se fusionan
- Nuevo CEO de Leroy Merlin en España
Feliz semana. Cuídense, por favor.
Gracias José Ramón por tu comentario.
Me da pie a animarte y animar a todos tus colegas a ser muy proactivos con los clientes para provocar esas bonitas sorpresas que esperas y que estoy convencido que pueden producirse.
Muy de acuerdo con tu articulo, y al cien por cien cuando dices: “ me reincorporo a esta cita semanal con una única certidumbre: que vivimos en la incertidumbre.”
Es bastante estresante este año que estamos viviendo de incertidumbre, donde de la estrepitosa bajada de ventas de marzo-abril, se paso a unos picos excesivos de subidas en mayo-junio o incluso julio.
Y ahora toca vivir otra vez instalados en la incertudumbre de como se presentara el mes de octubre, pues agosto y septiembre ya sabemos que son malos meses para las ventas (al menos en nuestra zona de influencia), y despues de octubre solo nos queda un mes para salvar el año, pues diciembre tampoco es amigo de buenas cifras…
En fin, que todos esperamos que la incertidumbre se convierta en bonitas sorpresas como las de mayo y junio…pero se alarga demasiado el miedo a no tener la solucion del maldito virus.
Suerte y salud para todos.
Que razón tienes Juan Manuel cuando dices lo siguiente “el sector de ferretería, suministros y bricolaje tendrá un papel protagonista para garantizar la satisfacción de muchas de esas necesidades”
lastima que el gobierno no opine lo mismo, todos suponemos que en la Moncloa no se rompen grifos, ni se limpia con productos de droguería, ni se atascan tuberías etc
El caso es que estoy totalmente de acuerdo con tus afirmaciones año complicado y raro, pero ahora es momento de dar un paso al frente y decirle a nuestros clientes que estamos aquí, para ayudarles y ofrecerles tiendas seguras y con producto para satisfacer sus necesidades.
Eso si ,necesitamos como he dicho arriba, que el gobierno nos deje trabajar, que los proveedores puedan suministrarnos a los distribuidores en tiempo y plazos y que nuestros clientes puedan desplazarse a nuestros centros de forma rápida y segura.