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Gritos y susurros

El título del post rememora una magnífica película de 1972 del director sueco Ingmar Bergman en la que exploraba una vez más el alma humana. Me acuerdo ahora de ella porque las protagonistas –tres hermanas- eran incapaces de comunicarse entre ellas. Ni gritando ni en susurros. Algo parecido a lo que está pasando ahora mismo en determinados ámbitos del sector de ferretería.

Organizaciones conceptualmente hermanas, históricamente próximas y con retos similares de cara al futuro cercano no acaban de entenderse. Ni gritando los desencuentros y rencores históricos –la peor manera posible-, ni susurrando las ventajas de un entendimiento provechoso de cara al mercado, a la cadena de distribución y al consumidor final.

El alma humana, como mostraban Bergman y tantos otros colegas cineastas, y filósofos, literatos, músicos y científicos de diversa índole, es compleja, insondable, responde a pautas no siempre analizables con la lógica aristotélica. El ser humano, obligado por naturaleza a sobrevivir en grupo, se empeña, a veces, en sucumbir en solitario.

“No es nada personal, son negocios”, es una frase repetida entre los mafiosos, cuando se exterminan entre ellos por el control de un determinado negocio. Es mentira, claro. Los negocios los hacemos las personas y como tales personas tenemos un alma compleja e inextricable que condiciona aquellos por unas pulsiones que no siempre podemos controlar ni  mucho menos prever.

Apelar a la razón nunca está de más y, en mi opinión, todavía se está a tiempo de reconducir ciertos desencuentros si la razón económica se impone a las pulsiones más oscuras del alma de los negociadores. Y, en todo caso, habrá que confiar en que hombres sensatos de unas y otras organizaciones –que los hay- acaben imponiendo su buen criterio en beneficio del bien común. Es cuestión de ponerse a ello.

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FERNANDO GALVAN
FERNANDO GALVAN
24/10/2011 20:27

Pues claro que las personas hacen los negocios y son la base de las empresas.
Las grandes y pequeñas empresas no son nada sin las personas. Confiemos en que en esta ocasión tengamos sentados en la mesa a grandes personas , con gran sentido común y que sepan ver que si queremos ser grandes debemos superar las diferencias pequeñas y grandes.Hace unos años se podía llamar “vision de futuro “.Hoy , si no se llega a un acuerdo, sería “no ver la realidad”.

Pepe saez
Pepe saez
24/10/2011 17:40

“Los negocios los hacemos las personas…”

Muy bonito, muy cierto, pero muy alejado de la realidad, al menos de la forma de entender el negocio en este sector. A veces creemos que las empresas funcionan por si sólas, y no por la gente que las conforma…

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