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Shakespeare resuelve la duda: La morcilla forma parte del sector cárnico

La Morcilla y Shakespeare

¿Forma parte la morcilla del sector cárnico? La pregunta surgió de manera inesperada casi al final de la jornada “Oportunidades de Internacionalización del sector cárnico” que organizó ANICE junto con Cajamar en las instalaciones del ICEX.

Evidentemente quedó sin respuesta porque ese no era el lugar apropiado para realizarla. De hecho, probablemente no era más que un intento de un productor de morcilla para reclamar más ayudas por parte de administraciones y organizaciones sectoriales.

Sin embargo, sirvió para alimentar algunas conversaciones posteriores acerca de los muchos productos cárnicos que ofrecen nuestras empresas y que en ocasiones quedan minimizados ante la imagen que tienen otros entre los consumidores, como el jamón, sin ir más lejos.

Lo cierto es que mostrar como reclamo una buena morcilla, una buena longaniza, un buen salchichón o unos buenos callos parece menos atractivo que utilizar un jamón.

Pero no es menos cierto que se pueden perder oportunidades de negocio si no se aprovecha al máximo el potencial atractivo (y comercial) de estos productos.

Sobra decir que, en el caso de la morcilla, las empresas especializadas en dicho producto sí la muestran en su máximo esplendor. Pero no sucede lo mismo con empresas con una oferta de productos más amplia ni con las administraciones. Se ven pocas degustaciones (o acciones de marketing institucional) de morcilla, callos, longaniza o salchichón para agasajar a delegaciones diplomáticas.

Así que sirva este post para romper una lanza en favor de la multitud de productos que como la morcilla conforman la oferta cárnica española y que en ocasiones están un poco olvidadas incluso por el propio sector.

Por último, dado que la pregunta de si la morcilla forma parte del sector cárnico quedó sin respuesta, humildemente voy a tratar de resolver la duda con un sí rotundo basado en tres argumentos de negocio:

  1. Por tradición. La morcilla siempre ha sido un producto cárnico. Y punto.
  2. Por industria. Son las empresas cárnicas las que siempre han elaborado la morcilla.
  3. Por imagen de marca cárnica. Que no se aproveche en ocasiones su potencial marketiniano no significa que quede fuera del sector. Jamón, chorizo, morcilla, salchichón, longaniza… todos ellos son tan cárnicos como un filete de ternera o un codillo de cerdo.

Y por si no queda claro que la morcilla forma parte del sector cárnico, desvelando que Shakespeare es una de mis debilidades literarias, voy a recurrir a un pasaje de ‘El mercader de Venecia’ que no deja ninguna duda al respecto.

Sucede cerca del final, en el juicio donde Shylock reclama el cumplimiento de una clausula del contrato que firmó Antonio. Allí se decía que si éste no le devolvía el dinero en el plazo acordado, a cambio él podría recortar una libra de carne de la zona del cuerpo del propio Antonio que él eligiese.

PÓRCIA
Segun la ley y la decision del tribunal, te pertenece una libra de su carne.

SHYLOCK
¡Oh juez doctí­simo! ¿Has oido la sentencia, Antonio? Prepárate.

PÓRCIA
Un momento no más. El contrato te otorga una libra de su carne, pero ni una gota de su sangre. Toma la carne que es lo que te pertenece; pero si derramas una gota de su sangre, tus bienes serán confiscados, conforme a la ley de Venecia.

SHYLOCK
¡Oh juez recto y bueno! ¿Eso dice la ley?

PÓRCIA.
Tú mismo lo verás. Justicia pides, y la tendrás tan cumplida como deseas.

SHYLOCK
Me conformo con la oferta del triplo: poned en libertad al cristiano.

PÓRCIA
¡Deteneos! Tendrá el hebreo completa justicia. Se cumplirá la escritura.
Prepárate ya a cortar la carne, pero sin derramar la sangre, y ha de ser una libra, ni más ni menos. Si tomas más, aunque sea la vigésima parte de un adarme, o inclinas, por poco que sea, la balanza, perderás la vida y la hacienda.
¿Qué esperas? Cúmplase la escritura.

SHYLOCK
Me iré si me dais el dinero.

PÓRCIA
Cuando estabas en el tribunal, no quisiste aceptarlo. Ahora tiene que cumplirse la escritura.

SHYLOCK
¿No me daréis ni el capital?

PÓRCIA
Te daremos lo que te otorga el contrato. Cóbralo, si te atreves, judío.

SHYLOCK
¡Pues que se quede con todo, y el diablo le lleve! Adiós.

Así pues, si no es posible separar la carne de la sangre… ¿No va a ser la morcilla un producto más, y de los importantes, del sector cárnico?

Palabra de Shakespeare.

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