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Masters de la Reforma y el Aviador Dro

A fines del pasado febrero, dando un rutinario paseo alrededor de la oficina, me choqué de bruces, en un cercano parque, con la grabación en exteriores de un capítulo del programa Masters de la Reforma. Hacía una mañana soleada y templada, impropia del invierno, que no estimulaba a esas ensoñaciones con los ojos abiertos que me son tan propias. De haber sido Juanjo Millás, las parejas de bricoladores aficionados que interaccionaban embutidos en sus sofisticados monos de trabajo, hubieran sido los protagonistas de un cuento de terror apocalíptico. Imagine que es usted barrendero y encuentra montones de hojarasca en la esquina de su dormitorio; o instalador eléctrico y se encuentra cables pelados en la almohada. Yo que llevo todo el día en la oficina hablando de fabricantes de artículos ferreteros, accesorios de bricolaje, herramientas, etc… y, a la vuelta de la esquina, me encuentro con los obreros especializados de Servando Carballar compitiendo en el nuevo concurso de talentos. Menudo susto.   

Toda esta chapa para contarles que se aproxima el estreno de Masters de la Reforma, un nuevo programa de Antena 3 para retar a los aficionados al bricolaje y encandilar a grandes audiencias. Hemos buscado los que mejor bailan, cantan, cocinan, cosen y ahora toca rebuscar y elegir entre los mejores manitas de España.

Master de la Reforma es una gran noticia para el sector

La iniciativa que conduce el periodista Manel Fuentes y copatrocina Leroy Merlín no tiene todavía fecha de inicio pero, por el caudal de anuncios de los últimos días, creo que el debú está a la vuelta de la esquina. El programa me parece una gran noticia para el sector y estoy seguro que va a hacer extenderse un hobby que, muchas veces, está a medio camino entre la obligación, la necesidad y el recreo.   

Aunque seguro que la recomendación llega tarde y no viene a cuento porque no forma parte de lo que se espera de la televisión en horario de máxima audiencia, un ruego para los creadores del contenido: no estresen demasiado a los bricoladores. Dejé de ver MasterChef, a pesar de mi pasión por ese tema, angustiado por la tiranía del cronómetro.

Sin recomendaciones gastronómicas en lontananza me atrevo con un consejo para el domingo. Sean generosos con los menos favorecidos, con las mujeres, los emigrantes que tantas veces hemos sido y somos, los parados de larga duración y piensen en el mundo a legar a los humanos que están por venir. España duele pero menos…; hay que pensar, cada vez más, en entes supranacionales para gestionar un planeta en riesgo. Piensen a lo grande.  

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