El 13 de mayo de 2005 Txema Elorza fallece después de un accidente de coche en el término municipal de Alsasua. En el momento del deceso representaba casas como Aghasa Turis, Arfe, Fischer Ibérica, STS, Virutex, Manufacturas Calvo o Industrias Lotu. Pocos días después de su funeral la familia convoca un acto de homenaje al que acuden más de 300 personas. Este encuentro se convierte en el embrión de una fundación que lleva su nombre y en una entrega de premios que, 10 años después, se ha convertido en el acto social con más peso de nuestra industria. Los objetivos de la fundación son mejorar las condiciones y la calidad en el trabajo de todos aquellos relacionados con el sector de ferretería y bricolaje, prestar ayuda a las familias necesitadas y contribuir al desarrollo mediante la financiación de ayudas en especie en proyectos cercanos a este segmento económico en todo el mundo. Sobre la marcha me acuerdo de la ayuda prestada después del terremoto de Lorca, del apoyo al proyecto Apadrina una Neurona que ayuda a mejorar la calidad de vida de Álex y de alguna visita de la familia Pajares –Industrial Zapatera- a Perú para llevar material a las zonas más remotas y desfavorecidas del país andino. No quiero olvidar que el Libro Blanco y sus dos anexos publicados son las únicas cifras sensatas que existen para conocer nuestro sector.
Al sostenimiento económico de las actividades de la institución han contribuido todos los que han ejercido el mecenazgo, el patrocinio o son amigos de la Fundación. Por su peso quiero mencionar en este post a los mecenas por orden alfabético: AECOC, BricoKing, Cecofersa, Ega Master, Estanterías Simón, Fergrup, Ferroforma, Familias Txema Elorza y Kruzeta, Geze, Grupo Desa, Karcher, Librado Loriente, NCC, Panter, Rombull Ronets y Spax. Gracias a ellos, a la vasta lista de patrocinadores, a los miembros del Patronato y a otras muchas colaboraciones desinteresadas la Fundación Txema Elorza es lo que es.
Como hasta las mejores iniciativas despiertan recelos y desconfianza, quiero contar que cuando uno viaja por España y sale a la palestra la Fundación uno se encuentra, también, con desconocimiento, críticas soterradas vinculadas al afán de protagonismo de algunos y hasta dudas sobre las decisiones tomadas sobre candidatos, finalistas y ganadores. Vierto sobre este post lo que suelo decir en persona; ninguna institución creada por el hombre está libre de las características que conforman lo mejor y lo peor de nuestro comportamiento. Tampoco esta Fundación; sólo hay que recordar al ya menos honorable Jordi Pujol que ejerció de Presidente de Honor varios años. El balance sigue siendo inmensamente positivo. Si la Fundación Txema Elorza no existiera habría que crearla.
Mañana viernes tendremos un nuevo premiado pero lo más importante es que alrededor de 270 personas de todos los rincones de España vinculadas a la ferretería y el bricolaje se reunirán para que todo esto siga siendo posible.
Antes de salir para Ferroforma una recomendación gastronómica en Madrid: ambiente idílico y buenos currys en Thai Gardens.
Estimado Javier, como bien dices siempre en cualquier actividad de nuestra vida, habrá criticas, pero lo que es indudable que con este premio, se consigue reunir a profesionales del sector, que habitualmente se ven mas para hacer o intentar hacer negocio que para disfrutar de la mutua compañia.
Para mi ha sido y es un placer haber estado entre vosotros.
Ánimo y a seguir por este camino