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Propuestas para un Nuevo Modelo Energético

En la anterior entrada a este blog detallé las características y limitaciones de nuestro actual modelo energético. En esta, esbozo algunas actuaciones para cambiarlo.

El principal motor de cambio hacia un nuevo modelo deberá basarse en energías renovables, lo que permitirá reducir la dependencia exterior y limitar las importaciones de combustibles fósiles. En efecto, nuestra factura energética es del orden de 35.000 millones de euros/año, a pesar del desplome del precio de los hidrocarburos experimentado en el último año.

España alcanzó en el período 2000-2010 un liderazgo tecnológico e industrial indiscutible en las principales tecnologías renovables: eólica, solar fotovoltaica y solar termoeléctrica, lo que se debería haber aprovechado para propiciar el siempre anhelado cambio de modelo productivo de nuestra economía. Ese liderazgo se logró por una confluencia beneficiosa de esfuerzos en I+D en universidades, centros tecnológicos públicos y empresas privadas. Recuperar ese liderazgo tecnológico es una absoluta prioridad para una nueva política energética.

A continuación, detallo cinco grandes líneas de actuación que deberían vertebrar una nueva política energética para superar las limitaciones y problemas de nuestro actual modelo. Esas actuaciones afectan tanto a la producción como al consumo de energía:

  1. Favorecer y promover el autoconsumo de energía eléctrica. Esto pasa por derogar el Real Decreto 900/2015 que regula el autoconsumo de energía eléctrica, aprobado el pasado 9 de octubre y sustituirlo por otro más equilibrado y justo. Mediante esta actuación se posibilitaría una transición gradual hacia un modelo energético descentralizado y menos dependiente de las grandes empresas del sector.

 La siguiente figura muestra que cubriendo el 43% de la superficie de los tejados del país con paneles fotovoltaicos con una eficiencia de conversión de energía solar en eléctrica del 15%, típica de la gran mayoría de los dispositivos comerciales, se podría satisfacer toda la demanda de energía eléctrica doméstica:

Superficie de tejados necesaria a cubrir con paneles solares fotovoltaicos para producir el 100% de electricidad doméstica. Fuente: Marta Victoria y Rodrigo Moretón. Observatorio Crítico de la Energía.
Superficie de tejados necesaria a cubrir con paneles solares fotovoltaicos para producir el 100% de electricidad doméstica. Fuente: Marta Victoria y Rodrigo Moretón. Observatorio Crítico de la Energía.

2. Revertir las políticas de recortes en los incentivos a las energías renovables. Esta medida sólo afectaría a las instalaciones ya en funcionamiento, puesto que unas hipotéticas nuevas instalaciones no los necesitarían ya que, al día de hoy, el precio del kWh fotovoltaico o eólico es similar al producido mediante combustibles fósiles.

 3. Cierre de todas las centrales nucleares actualmente en funcionamiento, según alcancen el final de su vida útil. Dado el actual sobredimensionamiento del sistema, no sería preciso sustituirlas; caso de ser necesario para garantizar el suministro, la línea de actuación a seguir sería sustituirlas por centrales basadas en energías renovables.

4. Sustitución del carbón por biocombustibles, en las centrales que utilizan el primero. El carbón es el combustible fósil más contaminante de todos y su sustitución por biocombustibles es viable técnicamente, aunque se deben estudiar los costes económicos y sociales. El carbón es un sector muy sensible en España, ya que de él dependen numerosas comarcas del noroeste peninsular, a las que se deben ofrecer soluciones alternativas distintas a la habitual de “enterrar” en ellas el dinero público, política que han aplicado todos los gobiernos de España a lo largo del último medio siglo. Esta reconversión ya se está llevando a cabo en otros países.

 5. Promover políticas de eficiencia energética en diversos ámbitos: edificación (aislamiento energético de inmuebles), urbanismo (reconversión del alumbrado público mediante fuentes luminosas Led), consumo responsable, transporte (priorización del transporte por ferrocarril, promoción del vehículo eléctrico), etc.

A modo de conclusión

El cambio de modelo energético a un modelo descentralizado y basado en energías renovables es inevitable, ya está en marcha en numerosos países y aquellos que primero sepan adaptarse serán quienes podrán liderar ese cambio y exportar sus ideas y productos al resto. Los próximos gobernantes deberán darle un carácter prioritario a este problema para diseñar un futuro energéticamente más independiente y ambientalmente sostenible.

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Felipe Gonzalez
Felipe Gonzalez
13/04/2018 11:22

Bravo!!!, aunque pareces no tener en cuenta el factor principal del cambio, que es el interés político en mantener este sistema. La pregunta adecuada no es si se puede y debe hacer, como se pretende justificar en su artículo. Todo lo que es de utilidad social para el país puede no serlo para el bolsillo de los líderes. Antes de una transformación de la estructura económica el país debiera tener lugar una radical transformación de la estructura de poder. Basando éste en una dotación de poder ciudadano mayor. Como muestra un botón: http://www.libertaddigital.com/chic/corazon/2015-04-22/las-comisiones-del-rey-juan-carlos-y-otros-secretos-a-voces-de-zarzuela-1276546232/
http://www.elmundo.es/cronica/2014/02/23/530881d922601da2168b456c.html

Arturo Taibo
Arturo Taibo
16/06/2016 22:11

¿Y un día de invierno sin viento? ¿Cerramos el país?

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