Inicio / Opinión / Y ahora, ¿quién paga los platos rotos de los problemas de stock?

Y ahora, ¿quién paga los platos rotos de los problemas de stock?

Por Cristian Sánchez

Ante todo, me gustaría dar la gracias a C de Comunicación por la oportunidad que me brinda de expresar unas palabras acerca de los problemas de stock, que creo varios profesionales del sector sentimos actualmente. Se trata de una situación que está en boca de todos.

Vaya por delante que esta reflexión que planteo en ningún momento trata de ofender a ningún colectivo, sea proveedor, distribuidor o fabricante, ya que creo que todos remamos en la misma dirección. Y considero que estos colectivos deben ser nuestros partners para poder ofrecer a nuestros clientes las mejores soluciones. Ellos son a quienes nos debemos todos y en quienes debemos focalizar nuestros esfuerzos. No lo olvidemos.

Entrando ya en el meollo del asunto, últimamente solo escucho frases, recibo llamadas, mails o WhatsApp, etc., diciendo frases como: “hay problemas de fletes”, “hay problemas logísticos”, “tenemos que subir los precios”, “no tendremos stock hasta dentro de 2 meses” y un sinfín de frases de la misma índole.

Evitar que los clientes sufran los problemas de stock
¿El cliente debe pagar los platos rotos de los problemas de stock?

El cliente paga los platos

Y, ante todo esto, es cuando me pregunto: ¿quién paga los platos rotos? ¿El cliente, como siempre? Porque claro, yo me pongo en la piel de un cliente que va comprar un producto y se lo quiere llevar y el vendedor me dice que no tiene stock hasta dentro de 2 o 3 meses, porque hay muchos problemas logísticos, por las aduanas, porque no hay contenedores, etc. ¿Qué imagen me transmite esta empresa?

O peor aún. Que me encuentre que un producto que vi hace unos meses a un PVP, ahora lo veo un 5, un 10 o un 20 % más caro, por lo anteriormente comentado. Repito: ¿qué imagen me vuelve a transmitir esta empresa?

Está claro que nos encontramos en una situación compleja y que esto es un negocio en el que todas las partes deben ganar. Pero hay veces que no entendemos que, para ganar, dependemos sí o sí de nuestros clientes y no siempre vale actuar de forma unilateral por parte de una de las vías.

¿Fiel o infiel?

Y aquí me surge otra pregunta más y es algo que traslado a un tema de fidelidad o infidelidad.

Puedo llevar muchos años comprando ciertos productos a un proveedor, distribuidor o fabricante y por todos estos motivos no tiene stock para servir durante 2 o 3 meses. Si yo miro por mi cliente, lo normal es tratar de buscar soluciones en otras vías, con tal de poder satisfacer sus necesidades a costa de romper una relación con un proveedor o distribuidor con el cual he estado trabajando durante muchos años.

Claro, aquí podemos toparnos con sentimientos encontrados por parte de mi proveedor actual, que no entienda cómo puedo dejar de comprarle después de todo este tiempo. Pero creo que, volviendo a la frase anteriormente dicha, si me debo a mi cliente, que es quien nos hace seguir en el mercado actual, tengo que tomar medidas que puede que no sean las más populares. Pero, al final, lo que no podemos hacer es quedarnos de manos atadas esperando.

Solo espero que con estas palabras nos demos cuenta de que a veces entramos en una vorágine de excusas, problemas, etc., y no pensamos que no todo vale. Y que, si en la cadena que formamos un eslabón se rompe, quien termina pagándolo es nuestro cliente.

Notificar nuevos comentarios
Notificar
guest
2 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
Albert
Albert
24/03/2021 11:06

Es importante hacer una puntualización respecto a los problemas que sufre el mercado actualmente. El mundo hace ya muchos años decidió que solo se podía fabricar en Asia para ser competitivo. Afortunadamente ya son muchos los distribuidores que han entendido que ser competitivo no es sinónimo de ser el más barato. Esos distribuidores que entendieron que Europa, por ejemplo, aporta una calidad y valor añadido al producto, son los que menos están sufriendo esta situación. Es cierto que en un mundo globalizado, si las materias primas suben, lo hacen para todo el mundo, pero lo que también es cierto es que Europa al menos, no sufre los problemas de fletes que sí sufren los distribuidores que compran en Asia. ¿Deberemos empezar a entender que el precio es solo una de las palancas de gestión de compras?

Iker Pinedo
Iker Pinedo
12/03/2021 09:23

Este articulo me resulta tremendamente contradictorio. Me explico, los años te enseñan que eso de “Mi cliente” son sonidos del pasado, los clientes no son propiedad de nadie y nuestro trabajo es siempre tratar de conservarlos y crecer junto a ellos, pues su beneficio, es el nuestro, pero sabemos que años de trabajo se rompen a diario en segundos. Esto pasó ayer, pasa hoy y pasará seguramente mañana. Durante la ultima década, el cliente final, el consumidor de bricolaje y ferretería, ha disfrutado de puntos de venta mas y mejor preparadas, de mayor numero de marcas, marcas mas profesionales, con mas material disponible, con mas variedad, con mayor calidad, con precios cada vez más competitivos y con un servicio cada vez mejor. Esto es un hecho y una constante cuyo resultado ha sido el crecimiento del sector, en muchos casos con situaciones complejas, donde el cliente ha obtenido siempre mas ventajas que inconvenientes, pues, si no era la fabrica, marca, intermediario, distribuidor o punto de venta A, el B ó el C, le podían suministrar el producto deseado o uno muy similar, por lo que desventajas, como clientes que todos somos en el fondo, hemos tenido mas bien pocas (y… Leer más

Scroll al inicio