Inicio / Opinión / El consumo no tiene quien le escriba un plan B

El consumo no tiene quien le escriba un plan B

Arranca hoy una de las semanas más cruciales para la logística. El consumo se va a disparar. Y con él, las ventas on-line. El próximo fin de semana será el del Black Friday. Y luego las Navidades. El día del soltero en China demuestra hasta donde podemos llegar. Más de 25.300 millones de dólares (21.500 millones de euros) + 42 por 100 sobre 2016, de ventas por Internet en 24 horas. Más o menos todo lo que se vendió en España por ese canal el año pasado. Y eso que hablamos de un país inmenso pero oficialmente no capitalista. El mundo es así de paradójico.

Pocos días después, en España, Amazon y Opel escenificaban la entrega del primer automóvil adquirido por Internet. Un madrileño lo recibió 72 horas después de la compra. Esperemos que se trate tan solo de una operación de marketing. Si los coches que se vendan –que lo harán, el consumo es imparable- a través de este canal requieren de una entrega como la del primero… que quieren que les diga. Un camión y un enorme embalaje que contenía el vehículo, recorriendo la ciudad hasta el punto de entrega domiciliaria. En lugar de buscar soluciones a la distribución urbana:  “¡Traed madera!” que diría Groucho Marx.

Foto: Antena3 Noticias

El consumo, por un lado; los políticos, a lo suyo

Soluciones, debate para cotejar puntos de vista precisamente sobre la Distribución Urbana de Mercancías (DUM), es lo que buscaba la semana pasada la jornada que preparó UNO, la organización empresarial de logística y transporte, en la escuela de negocios ESIC. Loable esta iniciativa, como lo es la defensa de ese colectivo al sector logístico, enfatizando que políticas como “cortar calles” no es la solución. UNO está desempeñando un gran papel. Cada vez mejor. Y merece que se pondere ese esfuerzo.

Su mayor barrera a esa voluntad de cuadrar el círculo de la logística en las ciudades –entregas vs medio ambiente- está en la calle y la calle, como nos cantaron La Trinca, es de los políticos. Antes de Manolo, ahora de Manuela, de Ada o de Juan. Esos representantes de los ciudadanos, con ello de los empresarios, con ello de los canales comerciales, también el virtual, que no dejan de aprovechar ocasión alguna –como esa jornada- para demostrar que no son de este mundo. Que van “a su bola”, vamos. Y su bola es la de yo, mí, me, conmigo, que me pagan por mirarme el ombligo. Salpicada, eso sí, de “y tú más”. Bonito espectáculo, por llamarlo de alguna manera.

El problema de conjugar consumo, logística de entregas y recogidas (logística inversa) del canal on-line, suministro y distribución a tiendas, hostelería y comercio tradicional, con reducción de tráfico y contaminación en los núcleos urbanos, es de bigotes. Nadie ha dado aún con el ¡Eureka! Pero poco o nada podremos hacer si la administración no asume su papel. Un papel que pasa por descender a la realidad desde el particular Parnaso en el que suele habitar la clase política. Lugar del que salen medidas como obligar a golpe de Ordenanza a renovar la flotas por otras eléctricas en un plazo imposible.

Por fortuna, como también se vio en la jornada UNO/ESIC, no todo depende de la administración. Eso nos salva, por ahora y por los pelos. ¡Mucha suerte! porque capacidad sobra, a todos los logísticos para estas próximas fechas: la van a necesitar.

Notificar nuevos comentarios
Notificar
guest
0 Comentarios
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
Scroll al inicio